Hola a tod@s!!
Vuelvo, vuelvo…. Es que no pude evitar mostraros esta pequeña cosita que encontré…
Será que ando metida en mil historias y en ninguna… Pero una de las últimas podría ser ésta.
¿Os he dicho alguna vez que me encantan las ciudades donde la gente se mueve en bicicleta como uno más? Me refiero a esos ciclistas con traje, con chándal, señoras con la compra… mayores, jóvenes, madur@s… de todos los colores y culturas… Que suben, bajan, llueva o haga sol…
En Madrid no existe eso… somos tan tercermundistas que vamos a comprar el pan a la esquina en coche.
Ah, la pequeña cosita era este cortometraje precioso, donde una bicicleta puede guardar un universo…
¿Qué niño en el mundo no desearía tener una bicicleta?
Por Dios, por Dios… vuelve y déjate de las adolescencias del Caralibro!
Besos
Me gustaMe gusta
Jajaja, querido Aceno, yo no uso el caralibro para adolescencias, sino para hacer la revolución y expandir valores perroflautas…
Me gustaMe gusta